"Gracias"

Hace unos días terminó otra cosa más. Siempre quedarán los buenos momentos, las charlas de antes y después de cada entrenamiento, las alegrías y abrazos después de un partido ganado y las cabezas gachas cuando cosechábamos una derrota. Se acabó un ciclo y dos de los mejores años de mi vida. ¡Gracias! Os deseo la mejor suerte en la nueva temporada y…algún día, algún año…volveré…juro que volveré.

"Y es ahora cuando realmente…"

Y es ahora cuando realmente me doy cuenta de que algo ha cambiado, son la 1:22 de la madrugada. Ya somos a día 12 de septiembre, día en la que todo vuelve a ponerse en marcha en mi antiguo instituto, IES Ronda.

Los pasillos volverán a impregnarse de ambiente estudiantil, el Sol volverá a penetrar en las aulas, la tinta y el papel volverán a estar al orden del día, el ruidoso timbre sonará de nuevo, las voces y gritos de niños y no tan niños volverá a resonar al cruzar la puerta y finalmente se oirán los chasquidos de las puertas de las aulas al cerrarse. El silencio reinará otra vez y los alumnos escucharán una vez más las explicaciones de los profesores, y la rutina se hará ama de esta situación, hora tras hora y día tras día…

Y es ahora cuando realmente siento nostalgia, ahora que faltan justo tres días para que se cumplan seis años de mi primer contacto con IES Ronda. Y desde aquel primer momento vienen multitud de pensamientos y recuerdos a mi mente…

La primera clase con nuestra primera tutora Carme Busquets, las interesantes explicaciones sobre meridianos y paralelos de Sussi, los resúmenes de catalán que nos hacía hacer Irene Tarrats y que aún conservo con cariño en mi ordenador, mi primer examen en el instituto con Mario, los dibujos de Montse Simón, nuestros primeros pasos con el alemán al lado de Silvia…también mi última clase con Portella, el sintagma preposicional de Adelaida, los exámenes tan largos y divertidos que hacíamos con Anna, las magistrales clases de Antoni, las frías clases de invierno con Agustín y Montse y también los bailes con Sonia, los exámenes de Segon, las canciones de Maria en clases de economía, los poemas amorosos de Salinas con Beatriu, las risas con Nuri, las amenas clases de Ángel, las duras mates con Ángela, la alegría que te contagiaba Maite cada mañana, los trabajos sobre el magnetismo con Carmentxi, la atenta mirada de Joan Ramón en el comedor esperando a que los más pequeños se acaben la sopa, la cómplice mirada de las secretarias cuando abandonabas cada tarde el instituto, los deliciosos manjares que nos preparaban en el comedor Dolors y su equipo, las sobremesas con los amigos, las horas del patio, nuestras salidas…




En fin, cientos de momentos y personas, estoy seguro que mi memoria me habrá jugado una mala pasada y no me habré acordado de todos los momentos ni de todas las personas de las que me hubiera gustado acordarme, no por eso menos importantes.

Y es ahora cuando realmente me siento algo extraño, me siento raro al pensar que mañana a las 9 yo no estaré allí empezando de nuevo las clases, un año más. Pero nos guste o no, todos los ciclos se acaban, y el mío acabó el pasado junio. Es ahora tiempo para dejar paso a los nuevos alumnos que entrarán por primera vez en IES Ronda, que vivirán 6 años inolvidables, 6 años en los que vivirán todo tipo de experiencias, 6 años de los que algún día decidirán dejar una pincelada en su Bitácora…

Ha llegado tu hora, te toca trabajar, esforzarte al máximo cada día, escuchar atentamente, estudiar mucho y lo más importante: Te toca disfrutar momento a momento, año tras año del que es ahora tu instituto.

¡Mucha suerte!